Sueños.
Hoy me apetece hablar de ellos. Y hoy no escribo de manera interiorizada, si no que hablo por todos aquellos que, como yo, tienen sueños.
Es cierto que desde pequeña quería y pensaba que sería una gran médica.
Nada más lejos de la realidad (nótese el sarcasmo) ya que actualmente estoy estudiando humanidades.
La verdad es que durante toda la primaria y la ESO nunca fui una persona que pudiera sobresalir del resto. De facto, no es que me encantara estudiar, pero creo que era porque tampoco había localizado mi destino en un futuro.
Siempre he pensado que los esfuerzos tienes que realizarlos sin presiones y con lo mejor que tú puedas dar para llegar a un fin concreto y de esa manera siempre tendrás algo a lo que aferrarte cuando veas que las situaciones se trasbalsan.
A seis meses de terminar mi vida académica de Bachillerato, me doy cuenta de lo deprisa que pasan los días, las emociones y sobre todo, los momentos. Pienso que es todo muy intenso y un constante proceso de madurez, perseverancia y valor.
Muchos de nosotros no sabemos lo que queremos hacer. Si no sabemos lo que haremos mañana, no tenemos ni tiempo para pensar lo que haremos el resto de nuestras vidas.
Por eso, yo creo que hacen lo que se nos ha establecido: Estudiar una carrera, trabajar y formar una familia.
No quisiera entrar en temas polémicos, pero yo soy de las que piensan que una vez que encuentras tu verdadera pasión, todo lo demás sólo son obstáculos para seguir en tu proceso de mejora y aprendizaje que es la vida.
Tengo aspiraciones a encontrar mi lugar en el mundo y ser feliz con ello, porque sé que podré hacerlo bien y demostrar de la misma manera todo aquello de lo que soy capaz.
No hay personas inútiles o poco listas - decía una de mis profesoras - mas hay personas que aún no han localizado aquello por lo que luchar.
Como he comentado antes, no sé realmente lo que me va a deparar el futuro, que es muy incierto, pero mis sueños están más claros que nunca y me siento bien pensando que estoy yendo por un camino en el cual, a pesar de todo, puedo sentirme orgullosa de tomar.